Publicado en Entretenimiento

Cada sentimiento nos alerta

El mundo de las emociones nos enloquece y se mezclan en la cabeza negándonos a abrir la mente para dejarlas salir. Las encerramos en su propia galaxia y no somos capaces de permitirles que nos envuelvan para sentir. Intentan fugarse por algún recodeco de nuestra alma y alguna vez lo consiguen pero cada uno de nosotros tiene un candado en la puerta y nos prohibimos sentir y vivir esas emociones.

Las emociones han de volar libres para hacernos conscientes de nuestras necesidades. Alguna vez sentimos una emoción e ignoramos que detrás hay una alarma que nos está advirtiendo de algo.

Tengo mi espacio cerrado porque me da miedo abrirles la entrada y no poder lidiar con mis sensaciones. Veo a la gente desde lejos y temo que me defrauden porque hay muy pocas personas que estén ahí sólo para acompañarme en esos momentos.

Juzgamos, siempre juzgamos y los humanos no nos paramos a pensar la vida que cada uno sufre, sólo criticamos y vilipendiamos. Alguien dijo que «cada vez que conozco más a los humanos más aprecio a los animales».

Hoy hablo de las emociones porque hay veces que siento algo y no soy capaz de interpretar lo que significa. Todas y cada una de ellas tienen razones ocultas que desconocemos. Ésto agobia y me encierra en ese laberinto de pensamientos que no sé interpretar. Todas y cada una de las emociones que sentimos nos alertan de peligro, de inseguridad, de soledad, de necesidades encubiertas y de muchas señales más.

Creo que ya es hora de coger de la mano a mis sensaciones e indagar porqué siento lo que siento.

Nuestro cerebro lucha por hacer caso a todo lo que sentimos pero otras veces se desconecta y sólo dejamos grietas pequeñas por donde pueden volar hacia nosotros.

Todo lo expresamos como sabemos y como podemos, las emociones bien interpretadas nos pueden desbelar muchas de nuestras necesidades.

El miedo, la tristeza, el asco, etc son sólo la punta del iceberg que nos ayuda a investigar el problema que subyace. Cuando somos conscientes de ello somos más capaces de descubrir nuestros miedos y así poder combatirlos. Incluso la alegría tiene su razón de ser.

Desde que aprendí ésto me concentro mucho más en lo que siento para poder conocer de donde vienen mis emociones o mi falta de ellas.

E. M§

Anuncio publicitario

Autor:

He aprendido a disfrutar con las cosas pequeñas que no tienen precio, todo lo que se puede comprar carece de valor en mi alma.

Deja una respuesta

Por favor, inicia sesión con uno de estos métodos para publicar tu comentario:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s