Publicado en Entretenimiento

Mi ángel de la guarda….

Cuando la vida te trata mal desistes de luchar y te encierras en una habitación oscura y sin aire. Pero llega un día un ángel y te revive para respirar la vida. Ese ángel viene sin avisar y en tu peor momento, es en ese instante en el que atisbas un rayito de esperanza.

Respiras de nuevo, abres tu corazón a posibles sueños y el cielo se convierte en un cielo rosa y blanco que te atrae hacia la vida. Esos ángeles que vienen a pasito lento y sin hacer ruido son aquellas cosas o personas que ponen las cosas en su sitio

Nuestro cerebro está tan preparado para asumir las emociones que es incontrolable, esos pensamientos están ahí y cuando él quiere los desencadena. Esa locura transitoria que te lleva a lo bueno o a lo malo según le venga bien y tu corazón sufre o ríe según alvedrio de la mente.

Mi ángel lucha conmigo, llora conmigo y a veces y sobre todo ríe conmigo. Ángel pasajero que a veces no ves pero siempre está ahí al pie del cañón. Los aires parecen que me hacen respirar sin ayuda y aunque sea en pequeñas dosis adoro el aire que respiro.

Hay personas que ignoran su valía porque para ellos ayudar es algo cotidiano, lo hacen porque así lo sienten y ni siquiera son conscientes del bien que hacen. Son aquellas personas que a veces pasan desapercibidas pero que cuando estás con ellas sientes el aire fresco y una pequeña pizca de esperanza.

Para todos aquellos que ayudan sin pedir nada a cambio en este mundo tan corrompido en el que vivimos, por ellos rompo una lanza…..

E. M§

Anuncio publicitario

Autor:

He aprendido a disfrutar con las cosas pequeñas que no tienen precio, todo lo que se puede comprar carece de valor en mi alma.

Deja una respuesta

Por favor, inicia sesión con uno de estos métodos para publicar tu comentario:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s