
Hoy hablo de este tema porque sé que hay muchas personas que han perdido este valor por el camino de la autodestrucción.
Lo más triste y más alarmante es que ni se dan cuenta. Es cómo cuando alguien roba una cartera y la víctima no es consciente de ello hasta que tiene que utilizarla
Lo mismo pasa con nuestra autoestima, con nuestro amor propio.. No somos conscientes de que nos han arrebatado esta cualidad hasta que un buen día queremos enfrentarnos a algo o a alguien y comprobamos que no tenemos ninguna arma para luchar.
Pero no quiere decir que la guerra esté perdida, sólo hemos perdido una batalla y seguramente este episodio nos hará más fuertes y nos mantendrá más alerta.
Somos lo más grande que hay en el universo. Si nos vemos feos, gordos, delgados, altos o bajos hemos de educar a nuestra mente para que no elabore historias falsas y espejismos en la cabeza. Pensemos que si nos comparamos con alguien, dicha comparación no es justa porque lo que pensamos de nosotros mismos no es real, es una imagen distorsionada que sólo apreciamos nosotros.
Cuando seamos conscientes de ésto, todo lo demás que nos lleve al cambio será más fácil.
El amor propio no es arrogancia, no es petulancia, no es soberbia sino que el amor propio es saber decir NO cuando no queremos hacer algo y saber defender con uñas y dientes aquello importante para nosotros. La humildad no elimina el amor propio, por contra lo afianza más.

Saber que todos nos equivocamos y nadie, pero nadie sin excepción, es perfecto, aunque de puertas para afuera puedan parecerlo, te hace ser menos exigente contido mismo.
Hay enfermedades que no se aprecian a simple vista pero están dentro de la persona, igual es con la perfección que vemos en los demás y no apreciamos en nosotros. Las personas que parecen perfectas tienen lo mismos sentimientos e inseguridades que nosotros, pero lo saben disimular mejor.
Hemos de estudiar todos nuestros defectos y elaborar una lista con dos columnas. Hemos de ser muy sinceros y no mentir, la lista es sólo para nosotros. En un lado ponemos defectos y en el otro virtudes… Seguro, casi al cien por cien, que las virtudes ganan por goleada.
Si en la lista de los defectos no aparece nada apuntado o muy poco, entonces tenemos una falta de visión objetiva porque no hay nadie que no tenga defectos. Si en la columna de las virtudes no hay muchas palabras igualmente tenemos una visión distorsionada de nosotros.
PARA QUERER HAS DE QUERERTE, PARA QUE TE RESPETEN HAS DE RESPETAR, PARA REIR HAY QUE HABER LLORADO MUCHAS VECES Y PARA SER FELIZ NO HAY QUE PENSAR EN LO QUE OPINEN LOS DEMÁS. TU AUTOESTIMA SÓLAMENTE TÚ ESTÁS CAPACITADO PARA RECUPERARLA.
Por último, aquello que nos decían nuestras madres y abuelas de que «la vida pasa y no te das cuenta» es algo tan cierto cómo que hemos de morir. ¿Por qué perder el tiempo llorando por lo que no tenemos en vez de reir por lo que sí tenemos?
Elena. M§
Respeta para que te respeten, no juzgues porque nadie está en los zapatos de nadie y no hagas a los demás lo que no te gusta que te hagan a ti.
- @mi_edad_perfecta
- @conmdesanchez
- https://www.facebook.com/helena.sanchez.90281
- https://www.elmundodeelena.es