Publicado en Entretenimiento

Mitomanía…..?

Nunca me subestimes cuando me veas en silencio. Sé más de lo que digo, pienso más de lo que hablo, y observo más de lo que te imaginas.

A lo largo de mi vida me he encontrado con personas cuyo medio de vida ha sido la mentira y no la mentira esporádica para eludir alguna consecuencia, sino la mentira compulsiva. A algunos de ellos los he apreciado de verdad, siendo una gran frustración descubrir todo lo enrevesado de sus historias.

No me voy a explayar en la mitomanía cómo trastorno de la personalidad porque no soy entendida en el tema, pero sí mi experiencia y cómo he desarrollado un sentido muy agudo a detectar irregularidades.

Cuando he conocido a alguien, ya sea amigos, parejas e incluso a familiares, siempre he sentido una sensación rara de escalofrío y tristeza, que por mi desconocimiento, ignoraba.

Partiendo de la base de que todos hemos mentido alguna vez para excusarnos de algo y evitar un posible castigo, cuando hablo del mentiroso compulsivo o mitómano, me refiero al que hace de la mentira su vida.

Te conocen, te encandilan, te dicen aquello que quieres oír aunque lo que piensen realmente sea todo lo contrario de lo que afirman. Estas personas quieren presentarse ante ti, triunfadoras, especiales y la mentira se convierte en su arma diaria.

Cuando conocí a una persona de este tipo, en el primer momento no, pero cuando llevaba tres o cuatro citas ya presentía esa sensación de desasosiego y escalofrío, que entonces, no supe interpretar.

A medida que la relación se iba afianzando era más consciente que algo fallaba, que había algo en mí que me alertaba pero que por una razón u otra acallaba y dejaba pasar.

Las mentiras se van entrelazando unas con otras y lo que que es más curioso, mienten en reuniones con amigos en común, y es entonces cuando te das cuenta que algo falla, que lo que les está narrando al resto, es una realidad deformada…

También me he encontrado amigos que me contaban una historia a mi y al otro otra historia diferente. En reuniones conjuntas en la que esa persona volvía a relatar su aventura, volvía a dar otra versión quedàndonos asombrados los que ya sabíamos de ese acontecimiento.

Cuando éstos mitómanos son descubiertos, porque muchas veces sus historias no se mantienen, lo niegan y vuelven a mentir para evadir lo que se pueda pensar de ellos.

No les importa hacer daño a quien sea si con ello consiguen sus objetivos. Se les intenta ayudar pero niegan su adicción cómo cualquier otro adicto. A la larga sus allegados se van alejando por no poder convivir con ellos. Aún así ellos se recomponen y siguen actuando de la misma manera pero centrando su foco en otras personas.

Con los años y el tiempo, ahora no ignoro las señales y estoy atenta para no sufrir por estas personas. Aunque es una adicción, no son ajenos al daño que provocan, pero les da igual si con ello consiguen la admiración del resto.

En el fondo son personas inseguras de si mismas, súper calculadoras que van entrañando una red de mentiras en torno a ellos y que cuando hay alguna verdad entre medias es imposible de creer.

Nuestra mente sabe captar esas anomalías y nos lo transmite de muchas maneras, ya depende de nosotros ponernos a la defensiva para no ser dañados más de lo que se dañan a sí mismos.

«El mentiroso cuando se ve descubierto se enfada o se hace la víctima»

Un sabio dijo……
Anuncio publicitario

Autor:

He aprendido a disfrutar con las cosas pequeñas que no tienen precio, todo lo que se puede comprar carece de valor en mi alma.

Deja una respuesta

Por favor, inicia sesión con uno de estos métodos para publicar tu comentario:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s